En los pacientes que precisan tratamiento antibiótico endovenoso durante periodos prolongados, como son los pacientes con fibrosis quística, la estancia hospitalaria supone una disminución de su autonomía y bienestar, junto con el de sus familias.
La administración domiciliaria del tratamiento endovenoso tiene como objetivo proporcionar la misma calidad asistencial que en el hospital, y mejorar la calidad de vida de los pacientes y sus familias, dado que se produce una menor disrupción de la vida familiar. Además, la disminución del tiempo de hospitalización, permite disminuir el riesgo de infección nosocomial y reducir considerablemente los costes directos e indirectos del tratamiento.